Un estudio propone una “carretera del agua” entre Coquimbo y O’Higgins que podría reducir costos en un 24% y el impacto ambiental en un 40%.
Un estudio realizado por GEM Mining Consulting ha mostrado que la colaboración entre las operaciones mineras en el uso de plantas desaladoras podría generar importantes beneficios económicos y ambientales. Según el análisis, si las empresas mineras de las regiones de Coquimbo y O’Higgins colaboraran, sería posible crear una “carretera del agua” que abastecería a 11 minas de cobre con agua de mar, reduciendo costos operacionales y el impacto ambiental.
El estudio, que incluyó 41 minas y 39 plantas desaladoras en Chile, proyecta que esta integración permitiría reducir en un 24% los costos operacionales relacionados con el agua, además de disminuir en un 40% la longitud total de los acueductos necesarios. Esto no solo generaría ahorros económicos, sino que también reduciría significativamente el impacto ambiental de la construcción de infraestructura adicional.
Para más información del estudio en el siguiente enlace.