
El metal rojo subió 2,9%, mientras los inventarios en Shanghái cayeron 32% en una semana por alta demanda de refinado.
El precio del cobre cerró la semana del 21 al 25 de abril en US$ 4,25 por libra, marcando un alza semanal de 2,9% y elevando el promedio anual a US$ 4,23 por libra. El repunte fue empujado por una drástica caída del 32% en los inventarios de cobre refinado en la Bolsa de Futuros de Shanghái (SHFE), atribuida al aumento de la demanda ante la menor disponibilidad de chatarra como insumo alternativo. “El mercado reaccionó a una señal clara de estrechez en la oferta de corto plazo”, indicaron fuentes del sector.
A nivel global, la incertidumbre económica también influyó. La agencia Moody’s rebajó la perspectiva del sector minero de estable a negativa por el menor crecimiento proyectado en China y tensiones comerciales. Además, el dólar mostró volatilidad por las fricciones entre el presidente Trump y la Reserva Federal. En paralelo, los inventarios totales en las tres principales bolsas de metales cayeron 11,3% en la semana, destacando que el 59,1% del cobre almacenado ya está reservado para entrega inmediata.