fuente: reuters/latercera
El precio del petróleo superaba los US$ 56 por barril el martes y se mantenía cerca de un máximo de 11 meses, ya que un suministro más ajustado y expectativas de un descenso en los inventarios en Estados Unidos contrarrestaban la preocupación por el aumento de casos de coronavirus a nivel mundial.
Arabia Saudita ha dicho que recortará su producción en 1 millón de barriles por día extra en febrero y marzo para impedir que los inventarios sigan subiendo. Se espera que los últimos reportes de suministro petrolero en Estados Unidos muestren que las existencias cayeron por quinta semana seguida.
A las 1013 GMT, el crudo referencial internacional Brent subía US$ 1,04, o un 1,87%, a US$ 56,70 el barril, mientras que el West Texas Intermediate en Estados Unidos (WTI) ganaba 98 centavos, o un 1,88%, a US$ 53,23 el barril.
“Creo que el mercado concluirá rápidamente que el modesto declive de ayer en el precio, a condición de que la propagación del virus en China siga contenida, fue solo un punto en la pantalla del radar”, dijo en un reporte Stephen Innes, estratega jefe de mercados globales de Axi.
El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, que asumirá el cargo el 20 de enero y gozará de un mandato con un control demócrata de ambas cámaras del Congreso, ha prometido “billones” de gasto extra para aliviar la pandemia.
El crudo mejoraba también por expectativas de un mayor descenso en las existencias petroleras en Estados Unidos. Analistas en un sondeo de Reuters esperan que los inventarios caigan en 2,7 millones de barriles, sumando la quinta semana consecutiva de declives.
La preocupación por la demanda ante el aumento de casos de coronavirus a nivel mundial limitaba las ganancias.
Las autoridades chinas aprobaron nuevas restricciones en áreas en torno a Pekín el martes, dejando confinados a 4,9 millones de residentes. Por su parte, Japón ampliará su estado de emergencia más allá de Tokio ante el alza de casos del virus.